Jesús dice en Juan 14: 7 Si me conocieran, también conocerían a mi Padre; y desde ahora lo conocen, y lo han visto. 8 Felipe le dijo: Señor, muéstranos el Padre. Con eso nos basta.

9 Jesús le dijo: Hace ya tanto tiempo que estoy con ustedes, ¿y tú, Felipe, no me has conocido? El que me ha visto a Mí, ha visto al Padre; ¿cómo entonces dices: Muéstranos al Padre”?

10 ¿No crees que Yo estoy en el Padre, y que el Padre está en Mí? Las palabras que Yo les hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre, que vive en Mí, es quién hace las obras. 11 Créanme que yo estoy en el Padre, y que el Padre está en Mí; de otra manera, créanme por las obras mismas.

Hay momentos en la vida, en que cada una de nosotras, QUISIERA que lo que Felipe le pide a Jesús, fuera posible. Por supuesto, que sabemos que Dios no tiene forma física. Aun así, hay momentos en que Dios parece estar tan lejano, tan intocable, que quisiéramos seriamente poder verlo.

Nos encantaría mirar a Dios y poder escuchar Su voz audible en nuestros oídos. En esos momentos,CREEMOS, que si pudiéramos ver y escuchar a Dios, entonces nos sería más fácil vivir para Él, en este mundo.

Cuando Felipe le hace esta pregunta, Jesús le contesta, “Hace ya tanto tiempo que estoy con ustedes, ¿y tú, Felipe, no me has conocido? En vez de concederle su deseo, o de tratar de explicarle a Felipe el por quéSU DESEO no era buena idea, ¡o hasta era imposible! Jesús comienza a enseñarles, lo que realmente significa ver a Dios… ¡Y COMO VERLO!

Jesús comienza enseñándoles las limitaciones DE ESTA CLASE DE VISTA. Lo que Felipe le estaba diciendo era, “¡Señor, nosotros conoceríamos a Dios si solo pudiéramos verlo!”

Y básicamente Jesús le responde: “Que extraño, Felipe. Yo he estado contigo tres años. Tú me has visto todo este tiempo,y sin embargo, ¿NO ME CONOCES? ¿Por qué piensas que si vieras a Dios, eso te ayudaría a conocerlo?

Obviamente, LA CLASE DE VISTA a la cual Felipe se estaba refiriendo, no nos lleva al conocimiento de NADIE. Entonces ¿DE QUE VISTA ESTABA HABLANDO? Jesús se refería… QUE LA VISTA “QUE PERCIBE QUIEN ES ÉL”, ¡PERCIBE A DIOS. Lo importante NO ES VER, ES PERCIBIR.

El diccionario nos da el significado de la palabra “percibir.” Es comprender, es sentir, es captar mentalmente, es tomar conciencia, y discernir.

PAUSA

Teniendo en cuenta, que si ver físicamente es lo importante, entonces podríamos sentirnos privadas, impedidas, o hasta estafadas.Porque no solo no podemos ver a Dios, sino que tampoco podemos ver a Jesús, ¡que fue el privilegio que Felipe tuvo! ¡SIMPLEMENTE JESUS NO ESTA AQUI! ¡NO PODEMOS VERLO!

Por otro lado, si percibir es la verdadera vista, entonces no estamos privadas de nada, porque nosotras podemos percibir a Jesús, y cuando lo percibimos, ¡PODEMOS PERCIBIR Y CONOCER A DIOS!

Nosotras podemos conocerlo de la misma forma que Sus discípulos lo conocieron,leyendo y meditando en la Palabra de Dios, ORANDO, y OBSERVANDO COMO OBRA DIOS, A TRAVES DE NUESTRAS PROPIAS CIRCUNSTANCIAS. Y también, ¡A TRAVES DE OTROS CREYENTES!

Jesús dice en Juan 17:3, “Esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.”

La palabra “creer” es repetida TRES VECES en este pasaje. Es otro ejemplode las enseñanzas del Nuevo Testamento, QUE EN COSAS ESPIRITUALES, CREER viene primero, Y LUEGO, la verdadera vista, le sigue.

En Juan 4:48, Jesús también dice, “Si ustedes no ven señales y prodigios, NO CREEN.” Esta era la descripción verdadera del pensamiento de la gran mayoría de hombres y mujeres de Su época. El mundo de hoy opera bajo la misma antigua filosofía, que dice “Ver es creer,” Pero Jesús la invierte, y dice, “CREER ES VER.”

En Juan 4:50, Jesús le dice a un noble, que había ido a Jesús para que sanara a su hijo,“Vuelve a tu casa, que tu hijo vive. Y ese hombre CREYÓ en lo que Jesús le dijo, y se fue.” Y PORQUE EL NOBLE CREYÓ, entonces VIO aquello que había pedido.

En Juan 11:40, justo antes de que Jesús resucitara a Lázaro de los muertos, Jesús se voltea hacia la incrédula de Marta, y le dice, “ ¿No te he dicho que, si crees, verás la gloria de Dios?”

La cuestión de ver a Dios termina… cuando creemos en Jesús. Pero no debemos de pensar, que creer es una cosa subjetiva e intangible. Que tenemos que forjar nuestra propia fe, poniéndonos a soñar, o a imaginar, O anticipando nuestras propias ilusiones. ¡Esta no es la idea bíblica en absoluto!

En este pasaje, Jesús habla de dos niveles de creer. El primer nivel es de creer en Sus Palabras. Y el segundo, es de creer en Sus obras. Es decir, creer es tan objetivo y tangible como las palabras y las obras de Jesús. ¡Jesús no nos pide fe ciega! ¡Él nos llama a una fe pensante!

Aquí Jesús desafía nuestra fe pidiéndonos que pongamos Sus declaraciones a prueba en base a las cosas que Él ha dicho, y en base a las obras que Él ha hecho. El creer no tiene sentido, ¡si no está basado en las Palabras y las Obras de Jesucristo!

¿Quieres conocer a Dios? ¡Entonces ¡mira a Jesús! ¿Crees que Él te ama y que quiere lo mejor para ti? ¿Quieres recibir a Jesús, ¿ como tu Señor y Salvador? Si es así, repite esta oración después de mí.

“Señor Jesús, Sé que soy pecadora. Perdóname. Yo creo que moriste por mis pecados y resucitaste de entre los muertos. Ya no quiero pecar más. Ahora te invito a que entres en mi corazón y vida. Quiero seguirte, como mi Señor y Salvador para el resto de mi vida. En el nombre de Jesús… Amen.